La sede del Instituto Superior de Teología de las Islas Canarias (ISTIC) acogió ayer, 12 de abril, la ponencia La comunidad hindú en Tenerife: un siglo de convivencia, impartida por Uma Varma Bhatia. La conferencia, parte del XXVII Congreso Internacional Diálogo Fe-Cultura ¿Qué aporta la religión?, organizado por la Universidad de La Laguna y el ISTIC, se dividió en tres partes: el hinduismo y sus raíces, la comunidad hindú en Canarias y la experiencia personal de Varma.
La protagonista empezó la charla aclarando ciertas cuestiones que «la gente no sabe». La primera: «¿Tú eres hindú o india? La gente no sabe la diferencia». En este sentido, aclaró que la confusión radica en que la palabra «indio» es utilizada también para designar a los indígenas del continente americano, además, señaló que no solo las personas que practican hinduismo son hinduistas, pero para que no haya ninguna duda Varma declaró: «Soy hindú practicante del hinduismo».
Otra de las cuestiones que más le preguntan es si el hinduismo es politeísta, puesto que es una religión protagonizada por muchos dioses, sin embargo, «no, somos monoteístas porque creemos solo en un dios, en Brahma, que es dios creador del mundo». Respondiendo al tema de la reencarnación, explicó que se basa en la transmigración de las almas, ya que «se cree que solo muere el cuerpo, el alma sigue igual, es el ciclo de la vida y de la muerte hasta que terminamos nuestro ciclo Kármico, donde nos reunimos al final con Brahma», dijo.
Los elementos sagrados y la comunidad hindú en Canarias
Dentro del hinduismo hay muchos componentes sagrados y, uno de ellos, es el río Ganges, un lugar de peregrinación utilizado para baños de purificación, donde los hindúes, al menos una vez en su vida, tienen que ir. Otro, es la vaca, “no la comemos porque para nosotros es algo muy sagrado. Creemos que como al igual que una mujer da leche y la vaca también, tenemos ese pensamiento de que no nos la podemos comer”, comentó.
El «Om» es el principio de todos lo mantras, un «divino sonido poderoso» y una combinación de la unión de cuerpo mente y espíritu. El «Om» es el símbolo de Brahma y del universo entero. El «tika», «tilak» o «bindi» es la fuente de vida y energía que emana del «tercer ojo» cuya función es proveer al ser humano de intuición, conocimiento y fuerza. «Es lo que ponemos en la frente», señaló.
Los hindúes llegaron a Canarias en 1880. El primer motivo de inmigración fue el comercio. Llegaron del norte de la India (actualmente Pakistán) y el segundo movimiento se produjo con la partición entre la India y Pakistán. Los años 70 fueron el auge turístico que motivó a una mayor emigración y fueron el origen de fenómenos como «los primeros clubes indostánicos y lugares de culto».
«Conseguí la residencia más rápido de lo que pensaba»
A continuación, Varma contó cómo llegó desde su ciudad natal, Mumbal , actualmente Bombai, a Canarias. Estudió en un colegio católico y trabajó desde que tenía 17 años para pagar sus estudios. «Conseguí varios diplomas como el de Magisterio, Derecho, Empresariales y Comercio», recordó. Asimismo, trabajó de profesora de inglés y sociales, y ahí fue cuando conoció al que sería su futuro marido, profesor de Matemáticas y Biología. Se trasladaron a las Islas Canarias en 1988. «No sabíamos nada de español, solo hola y gracias», afirmó.
«Conseguí la residencia más rápido de lo que pensaba», añadió. Con los años, consiguió la nacionalidad española y, actualmente, posee la doble nacionalidad. El mayor problema que tuvo Uma fue que en España no aceptaron la carrera que poseía de Magisterio, pues no pudo convalidar los títulos que había obtenido en la India.
Con el tiempo nacieron sus hijas y terminó por convertirse en ama de casa, «pero estoy contenta porque una es médico y otra es ingeniera, las quiero mucho». Consiguió un pequeño trabajo como profesora particular y, además, ayudaba a su marido con su negocio. Finalmente, consiguió una ocupación como traductora de hindú, «siempre quedará una pequeña pena en mi corazón: no haber sido reconocida por la carrera que me llevó tanta dedicación», recalcó.
Para teminar el relato de su experiencia, proyectó unas fotos mostrando el paso del tiempo desde su llegada y cómo ha ido creciendo su familia y la comunidad hindú en Tenerife.
El resto de actividades continuarán hoy viernes y mañana sábado en el Instituto Superior de Teología de las Islas Canarias (ISTIC).
