Pasar del mar a la montaña nunca fue tan fácil. Tampoco se entreteje el azul y el verde, que dan lugar al más valioso amarillo de Canarias, con tanta inmensidad en otro lugar del Archipiélago. Explorar cada rincón como si ante una obra de arte se estuviera, observar el atardecer más bravo a 2426 metros de altura en el Roque de los Muchachos, sucumbir una y otra vez a los encantos de La Palma. Isla Bonita, preciada y adorada.
Contaminación lumínica, una amenaza para el cielo canario
Este fenómeno se refiere al brillo o resplandor excesivo e innecesario en el ambiente nocturno que,