La cantante navarra Natalia Lacunza dio el salto a la escena pública tras su tercer puesto en Operación Triunfo 2018. Sin embargo, su recorrido musical comenzó en 2019 con la salida de nana triste junto a Guitarricadelafuente. Este éxito acabaría incluido en otras alas, su primer EP y génesis de una artista que enlazaría su crecimiento con ep2 y su consagración en el panorama español con Tiene Que Ser Para Mí en junio de 2022.
¿Piensa que sus proyectos son la mejor forma que tiene de expresarse? «Totalmente. Mi trabajo lo bueno que tiene es que es mi forma de expresión. Es la manera en la que canalizo mis emociones, me hago y me deshago las bolas gracias a la música. Realmente, es una suerte».
¿Cree que otras alas y ep2 fueron el camino que necesitaba para llegar a Tiene Que Ser Para Mí? «Totalmente. Los dos EP han sido como el trabajo previo a poder lanzar un álbum entero y se nota mucho la experiencia que cogí. Supe elegir muy bien el equipo y el modus operandi de cómo quería llevar a cabo el proceso creativo. Sentí que todos los fallos y errores de los EP me sirvieron para hacerlo muy bien en este disco. Y espero crearlos mucho mejor».
Y además son dos EP muy distintos entre sí… «No lo sé, no lo veo así. Percibo que uno es el hijo del otro. Siento que otras alas era un poco lo primero que hice distintivamente y en ep2 intenté matizar todo lo que había pretendido realizar en el anterior trabajo. Como han sido producidos por personas diferentes tendrán ese punto de cambio. También es verdad que al haberlos creado yo pierdo la objetividad y puede que sean muy desemejantes y yo no me esté dando cuenta».
A lo largo de su carrera se ha movido en distintos registros. ¿En cuál se siente más cómoda? «Me siento cómoda en el cambio. No me gusta quedarme siempre en lo mismo y tengo mucha música que me gustaría hacer a parte de la ya hecha. Tengo muchas referencias diferentes y, cuanta más música escucho, más va creciendo mi imaginario. No existen límites».
«Todas las canciones de Tiene Que Ser Para Mí son parte de una historia»
Además de musicalmente, ¿cree que personalmente necesitaba sacar este disco? «Sí. Profesional y personal se acaban juntando porque trabajo con mis propias emociones y vivencias. Entonces, es imposible que no se cree una fusión. Intento relativizar y saber separar mi vida privada de la pública, pero al final siempre acaba conectado».
¿Qué canción del disco le representa mejor? ¿Y cuál disfruta más interpretando? «Son todas parte de una historia. Aunque podría decir que me representa más Tiene Que Ser Para Mí porque es el estado final del proceso de mis vivencias. Me lo paso muy bien en No Me Querías Tanto. En esa canción echo los restos».
¿Qué ha cambiado de la Natalia Lacunza que compuso nana triste a la actual? ¿Qué queda de ella? «Buf, la Natalia que compuso esa canción era una bebé, mientras que la actual tiene unos años más físicos y, sobre todo, mentales. Y queda lo más esencial, que es la manera de sentir las cosas y de valorarlas por lo que son».
En Mi Sitio expresa que ha encontrado su lugar. ¿Cuál es? «No es un lugar físico, es emocional. Una zona de confort a nivel de las personas que me acompañan, del tipo de pensamientos que quiero repetirme, de lo que tengo que hacer para cuidarme… Es un sitio imaginario. Si encuentras tu lugar en tu mente da igual donde estés físicamente porque estarás bien».
«Mi madurez artística acabará el día que me muera»
¿Cómo ha vivido estos tres años de ascenso meteórico desde su primer EP? ¿Sigue sorprendiéndose? «Me sorprendo y sigo intentando asimilar que las cosas son ahora mismo así. Ha sido todo una montaña rusa. He pasado muchísimas fases y ahora es cuando más en equilibrio me siento».
¿Cree que ha alcanzado su madurez artística? «No. Creo que mi madurez artística acabará el día que me muera. Es algo que está en constante evolución en todas las personas que formamos parte de este mundo. La música perdura tanto en el tiempo como la persona, es decir, se va adaptando a ti como tú te adaptas a la vida. Nunca acaba el flujo de inspiración porque siempre hay y habrá música y aquella que te emocionaba lo seguirá haciendo y la que conozcas te iluminará. Siento que no hay fin en eso».
¿Qué metas artísticas y personales le quedan por cumplir? «Actualmente tengo muchos frentes abiertos en cuanto a tipos de música que quiero crear. Me gustaría poner el check a todas las ideas que tengo en notas. Deseo viajar e irme fuera de España a trabajar durante un tiempo y conocer más personas y empaparme bien de sus maneras de cultivar la música. Y en las personales podríamos estar aquí hablando tres horas ja, ja, ja…
¿Cuáles ha cumplido? «Muchas, aunque me gustaría estar más orgullosa de mí misma. Voy bien, pero es cierto que tengo mis momentos de duda y preferiría ser más segura».
¿Proyectos futuros? «A partir de octubre tenemos la gira de salas y un viaje pendiente a Latinoamérica y parte de Estados Unidos que me hace muchísima ilusión. Además, seguir componiendo y experimentando con mi equipo y con calma. En la música hay que hacer las cosas despacio».