El Plenilunio no decepciona

Cultura / Ocio

La capital tinerfeña acoge un año más la celebración de El Plenilunio, una jornada cultural, gastronómica y comercial que trata de rehabilitar la oferta de ocio en la ciudad. Desde la página web del evento se anunciaban para el pasado sábado 8 de abril actividades variadas y aptas para todos los públicos. En concreto serían 30 puntos diferentes que estarían disponibles para el goce y disfrute de cualquiera con un rato libre. Desde las 11.00 de la mañana zonas como el Parque García Sanabria y la Plaza de España abrían la jornada.

Con el lema Santa Cruz, el corazón de Tenerife y el objetivo de atraer a la visita de la zona se colocaron carteles por toda las calles con el mensaje «¡Vas a alunizar!» y no han decepcionado. Cientos de personas han disfrutado de un sábado diferente con actividades infantiles en la Plaza de España. Allí se han congregado castillos hinchables, puestos de la marca Libby’s donde se regalaban jugos, toldos dedicados a la pintura y juegos de piratas donde el objetivo era buscar el tesoro. En la Plaza de La Candelaria tuvo lugar la visita inesperada de seis SuperDinos representaciones teatrales con patines donde se exhibían escenas de las películas Disney.

Aunque la mañana comenzó pasada por agua, en el ámbito musical la variedad ofrecida no dejó indiferente a nadie. Hubo conciertos de reggae en La Plaza del Príncipe y de música Indie. Para concluir la noche, se pudo apreciar una perfomance de DJ’s hasta la 01.00 de la madrugada en el mismo lugar.

En el ámbito comercial, la cita destacó por la cantidad de puestos diferentes, donde se ofertaba desde cata de vinos o patas de jamón, pasando por la venta de trenzas de cuero, CD’s, áreas destinadas al mercado de comida saludable, hasta la venta de productos artesanales, ropa o pañuelos. La jornada del sábado fue extensa y especial, una de las más largas del año y no dejó indiferente a ninguno de los visitantes.

Nací, crecí y viví en un mundo de desigualdades, donde la verdad está al alcance de quien puede pagarla. Y estoy aquí para cambiar eso, acercar la realidad a todos y hacer que el valor de la verdad no tenga precio. Y si es con unas pinceladas de arte y algún que otro verso, mucho mejor.

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