La gente se agolpaba en las vías del andén. Esa mañana el metro rebosaba de energía y humanidad y nada parecía presagiar lo que iba a ocurrir. A las 8.00, la primera bomba hizo su aparición, y a ese estruendo le siguieron otras doce. Cientos de personas corrían hacia cualquier lugar para ponerse a salvo sin importar nada más. No era cobardía, era supervivencia. El 11 de marzo de 2014 se perpetró el mayor atentado terrorista que Europa había visto en su historia. La central de Atocha se convirtió en la tumba de padres, madres, hermanos, maridos y abuelos, 192 personas fallecidas que, en un instante, dejaron una huella imborrable.
El documental, de una hora y media de duración, nos sumerge en los relatos de los familiares de las víctimas, de periodistas, académicos o los propios servicios de emergencia que acudieron al lugar del siniestro. Basado en el libro 11M. La venganza de Al-Qaeda de Fernando Reinares, experto en terrorismo, podemos descubrir las motivaciones que llevaron a los implicados a realizar los atentados y quién fue Amer Azizi, su autor intelectual.
La cinta está dirigida por José Gómez, director de documentales español. Dentro de su filmografía podemos encontrar una carrera de mas de veinticinco años de experiencia en películas que recorren conflictos, terrorismo o problemas sociales de medio mundo, realizándolas tanto para plataformas digitales como televisión. La producción cuenta también con Kevin Macdonald, aclamado productor y ganador de un Oscar y un BAFTA.
La historia que relata, cuya complejidad es enorme, nos da una visión muy cuidada de todo lo que pasó aquel fatídico día. Los testimonios que se recogen muestran una parte humana que se puede llegar a desconocer muchas veces y evita acercarse a toda opinión política, centrándose en lo mas importante: las víctimas.
La grabación, que tiene más de 180 horas de metraje, abarca no solo el atentado, sino todo el procedimiento que se siguió tras lo ocurrido: las investigaciones policiales, la búsqueda y el arresto de todos aquellos que estuvieron implicados y, quizás, un detalle importante, el cambio de Gobierno de España y todo lo que ello conllevó. 11M es una muestra de las dos caras de la moneda que se vivió en la capital de Madrid, desde la destrucción hasta la humanidad, de la venganza a la solidaridad.
Los hechos, que aún estremecen a quién los cuenta, son un retrato de lo que está ocurriendo en muchos países hoy en día y la masacre que ello conlleva. La grabación se realizó con el apoyo de la Asociación de Ayuda Víctimas del Terrorismo (AVT), Asociación 11M Afectados por el Terrorismo, Asociación Ayuda a Víctimas del 11M y la Fundación Víctimas del Terrorismo que prestaron su voz para poder hablar por aquellos que no pueden.