El estudiantado de Ingeniería Química Industrial de la Universidad de La Laguna (ULL) ha convocado un paro académico del 11 al 18 de diciembre para reivindicar su derecho a tener clases presenciales, pues diez asignaturas del Grado se están impartiendo en modalidad online. Este hecho incumple la normativa, ya que la docencia del grado de Ingeniería Química Industrial está diseñada para ser presencial, al igual que sucede con el resto de grados de la ULL. Además, este miércoles, 11 de diciembre, a las 11.00 horas, se ha convocado una manifestación delante de la Escuela Superior de Ingeniería y Tecnología.
La situación se remonta a 2021 cuando una profesora comenzó a impartir las asignaturas de forma online, basándose en una recomendación de prevención de riesgos. En la actualidad, se encarga de la docencia de diez asignaturas y todas son online. Esta situación ha creado tensiones entre el alumnado y la docente, ya que se han presentado determinadas dificultades para poder seguir sus asignaturas. El estudiantado afectado afirma que «nos obliga a activar la cámara mientras ella no lo hace. Si tú no conectas la cámara, te echa de la clase y te impide seguirla».
Asimismo, la calidad de la enseñanza se ha visto mermada, al igual que el porcentaje de aprobados. Superar sus asignaturas se ha convertido en misión imposible. El alumnado matriculado en sus clases asegura que «solo aprueban quienes las han repetido cuatro veces y tienen suerte o quienes se van de Sicue o Erasmus. Hemos visto los datos del Gabinete de Análisis y Planificación (GAP) y se ha triplicado el número de personas repetidoras y de suspensos».
Queja al Vicerrectorado de Docencia
Por otra parte, el alumnado ha enviado una queja al Vicerrectorado de Docencia donde pregunta por qué la Universidad ha permitido la docencia online, a pesar de que en las guías docentes esté estipulado que esta es exclusivamente presencial. También cuestiona si, ante tal error, habrá algún tipo de compensación o descuento para quienes han tenido que pagar altas tasas de matrículas, pues han tenido que asumir dobles e, incluso, cuádruples matriculaciones ante la imposibilidad de aprobar.
A través del paro académico, el alumnado pide que se imparta la docencia de forma presencial y se investigue la idoneidad de la profesora para seguir impartiendo docencia o dejarla coger tanta cantidad de asignaturas.