El Observatorio de la Inmigración de Tenerife (Obiten), iniciativa conjunta de la Universidad de La Laguna y el Cabildo Insular de Tenerife, desarrolla cada mes de diciembre una intensa jornada técnica en la que especialistas tanto de ámbito local como estatal en gestión e investigación de las migraciones comparten puntos de vista sobre un asunto concreto, siempre alrededor de esta temática. La de este año comenzó ayer jueves, 14 de diciembre, en la Facultad de Economía, Empresa y Turismo, y se centró en la relevancia de la planificación comunitaria para construir la convivencia.
El encuentro fue inaugurado por el vicerrector de Relaciones con la Sociedad de la ULL, Francisco García, y el consejero del Área de Empleo, Comercio, Industria y Desarrollo Socioeconómico del Cabildo Insular de Tenerife, Efraín Medina. Tras ellos, el coordinador técnico de Obiten, Julio Ramallo, y la adjunta a la dirección del mismo organismo, María Eugenia Fonte, presentaron el programa de la sesión y repasaron algunos de los hitos del Observatorio durante 2017, así como algunos de los objetivos para 2018.
Francisco García: “Una sociedad diversa está bien nutrida y está más capacitada para afrontar los retos del futuro”
El vicerrector se refirió a la longevidad del proyecto Obiten, cuyos diecisiete años de actividad avalan la necesidad de que exista la reflexión sobre los movimientos migratorios, y más en un contexto que parece indicar que en los años venideros aumentará a causa de problemas como el cambio climático. Reflexionó que la migración trae diversidad y esta, riqueza social porque permite ver la realidad con otro punto de vista: “Una sociedad diversa está bien nutrida y está más capacitada para afrontar los retos del futuro”.
El consejero insular también se refirió a la larga trayectoria del organismo organizador de la jornada, que es una demostración de la estrecha colaboración entre su corporación y la Universidad de La Laguna. Se refirió al asunto sobre el que versa la jornada, el desarrollo comunitario, como un instrumento para hacer de la isla un ámbito acogedor y propicio no sólo para el bienestar de las personas, sino también para la economía.
El coordinador técnico de Obiten celebró que el Cabildo hubiera logrado consolidar presupuestariamente todas las líneas de trabajo del Observatorio, puesto que en 2018 se celebrarán algunos encuentros importantes, como la reunión de la red nacional de Ciudades Interculturales, al que está adscrito el Cabildo de Tenerife, o la participación en un proyecto europeo liderado por el municipio de Lampedusa (Italia) denominado Instantáneas desde la frontera.
Por su parte, la adjunta a la dirección de Obiten recalcó la importancia de que la jornada hubiera registrado 90 personas inscritas, pues demuestra que el de la integración social de inmigrantes es un asunto que preocupa. También reivindicó cómo la actividad científica desarrollada por el Observatorio tiene su reflejo en la vida real gracias a iniciativas como las Escuelas de Participación Social que se han desarrollado en varios barrios de la isla.
José Miguel Morales: «Que Obiten esté en Canarias es una oportunidad porque aporta una visión que muchas veces no se tiene en la Península»
Tras la presentación de la jornada, el primer ponente invitado fue José Miguel Morales García, secretario general de Andalucía Acoge, quien explicó la actividad de su organización en la ponencia Construyendo convivencia intercultural desde la frontera Sur de Europa.
Morales explicó que Andalucía Acoge es una federación de asociaciones que lleva trabajando desde 1991 en Andalucía, Ceuta y Melilla: “Salvo Canarias, abarcamos la frontera sur de este lado del Mediterráneo y el Atlántico trabajando desde en la atención directa a las personas migrantes hasta en trabajos de convivencia comunitaria y una línea importante relacionada con la sensibilización y la incidencia política para transformación de la realidad”.
El secretario general de esta federación señaló que cuando empezaron a trabajar en los años 90, no eran conscientes de que estaban localizados en un lugar que se convertiría en uno de los “puntos calientes” de las migraciones a Europa. “En estos 27 años no percibimos que haya una verdadera estrategia por parte de la Unión Europea ni por el Gobierno de España para hacer de esa frontera sur un espacio de respeto a los derechos humanos ni de gestión, en el sentido puro, de las migraciones”, destacó.
Cree que se ha reforzado una estrategia de contención por parte de esa “Europa fortaleza” que tampoco va a ningún sitio, “porque es evidente que, ante la situación que viven las personas en el África subsahariana o en Asia y Oriente Medio, ninguna valla va a lograr frenarlas”. En su opinión, este tipo de política lo único que logra es incrementar el número de muertes en el Mediterráneo: “Este año llevamos cerca de los tres mil».
Morales dijo que este modelo de migración corresponde al vigente modelo de economía: “La inmigración es el resultado de un desajuste mundial que no tiene visos de corregirse y parece que cada vez se ahonda más en él. Europa no acaba de asumir que las migraciones forman parte intrínseca de su modelo económico. En el caso español llevamos treinta años sin asumir que es una realidad estructural y por ello no se dan soluciones estructurales, sino puntuales”.
Sobre Obiten, señaló que es una referencia nacional en la construcción de conocimiento en torno a las migraciones: “Que el Observatorio esté en Canarias es una oportunidad porque aporta una visión que muchas veces no se tiene en la Península. Para nosotros, reforzar lazos con Obiten y con Canarias implicaría poder completar ese mapa de frontera sur que, como dije, es uno de los grandes puntos calientes en Europa”.