Al artista le gustaría ayudar a quienes menos tienen. Foto: PULL

«Mi meta en esta vida es que se acuerden de mí, y si no, de mi obra»

Cultura / Ocio

«Tengo 21 años, y he hecho cosas que quería hacer cuando tenía 19»

Aarón Caamaño, natural de Tenerife, sorprendió a su audiencia el pasado mes de abril con un EP titulado The Goldzilla con nueve canciones de rap, ninguna colaboración y distintos beatmakers. Este mes de junio impresionó al público con el vídeo de Thundercaster, una de las canciones que conforman el álbum. El clip viene de la mano del equipo profesional de VU.Music, una organización independiente de música urbana. Artísticamente Caamaño es conocido como Akata, un nombre que, según él, «solo define su producto, no a él como persona».

Akata comenta que al principio el rap era la opción más fácil y económica, ya que «no necesitaba tener conocimientos previos de música ni que mi madre se dejase mucho dinero en un conservatorio». Además, el artista asegura que este estilo musical era la forma de expresarse que más le cautivaba. Sin embargo, el rapero tiene claro que si no fuese por las personas que le rodean no estaría donde está. «Si me he movido tanto, y he tenido interés en sacar y aprender, es por mi gente, que tienen los mismos intereses y ganas que yo», relata.

«Con el diseño gráfico empecé preguntándole a un amigo, pero me cansé de preguntar y decidí aprender yo solo»


El artista empezó en el rap nutriéndose de todo lo que le llegaba, tanto a nivel auditivo como visual, quedándose y aprendiendo con cada cosa que le gustase. Aunque, «con el paso del tiempo, en quienes más me fijo es en mis amistades, en la gente de mi entorno que hace música», comenta el joven. También, ha tenido algunas personas que le han influido constantemente, como el reconocido rapero Canserbero.

Además de su afición musical, Caamaño también se encarga del diseño gráfico de su discografía y la de sus amistades. Una labor que empezó «preguntándole a un amigo para hacer las miniaturas de los vídeos de Youtube pero, cansado de preguntar, decidí aprender a hacerlo yo solo», afirma nostálgico. Además, esto le ha permitido ganar dinero, haciendo portadas de discos a sus personas allegadas.

«Aunque se hable del estilo canario, cada quien tiene una propia forma distinta del resto»


A menudo se escucha hablar del estilo canario. Akata opina que «cada quien tiene su propio estilo diferente». Las raíces isleñas son algo que ha estado presente siempre en su vida, pero no por ello se debe encasillar al conjunto de artistas en un mismo sitio. Además, asegura no considerarse fan de nadie, ya que le parecería incómodo que se lo hiciesen. «Solo soy seguidor de un gran número», concreta.

El joven cantante polifacético no solo se centra en el rap y en el diseño gráfico, también se presenta a las Batallas de Gallos. Estas han estado más limitadas en estos tiempos de Covid-19, aunque asegura no haber perdido la ilusión en algo que despierta su creatividad. Durante el estado de alarma, estos eventos siguieron de forma online, aunque él no se ha presentado a ninguno ya que asegura que «no motiva hacerlo tras una pantalla».

El artista tiene claro que quiere ser recordado para siempre. «Akata es la obra, no yo. Mi meta en esta vida es que se acuerden de mí, y si no, de mi obra», comenta Caamaño entre risas. Además, el cantante asegura que «cuando tenga ingresos de la música, me gustaría ayudar a quienes menos tienen. Creo que sería un buen acto».

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