Quevedo, la Isla a tus pies – Periodismo ULL
El Estadio de Gran Canaria acogió a 41 000 personas. Foto: D. Rodríguez

Quevedo, la Isla a tus pies

Música

Quevedo ya lo adelantaba: «Va a ser el concierto más importante de mi carrera». Esa premisa era lo único que hacía falta para entender que no iba a ser una noche más. El estadio de Gran Canaria recibió a 41 000 personas el pasado sábado, 24 de mayo. Miles de camisetas amarillas tiñendo las gradas. La emoción era palpable. Las pantallas proyectan pequeños fragmentos de su recorrido. Sus inicios, las primeras maquetas, él mismo produciendo música en su habitación… una oda visual al chico que soñaba con llenar este estadio y que, tras muchos años, lo había conseguido. 

Los primeros acordes de Kassandra suenan y aparece un primer plano de Quevedo caminando sobre una alfombra roja que recorría todo el escenario. El arte visual de su último álbum, Buenas Noches, tomaba forma real en un despliegue escenográfico impresionante: más de 800 metros cuadrados de pantallas LED, 924 focos, 326 cajas de sonido y 12 generadores eléctricos daban vida a una puesta en escena sin precedentes en las islas.

El repertorio fue un viaje emocional. Hubo espacio para los ritmos de este nuevo disco como Chapiadora, 14 Febreros o Duro, pero también canciones de su primer álbum Donde Quiero Estar, como Playa del Inglés, Punto G o Sin Señal. La transición entre sus distintas etapas musicales permitió al público recorrer junto a él su evolución artística y personal. 

«Me alegra que estés donde quieres estar, Pedro»


No estuvo solo. Compartió escenario con los cantantes canarios Maikel Delacalle, interpretando Mi Nena Remix y  Lucho RK, con el potente Guaya. También estuvo presente La Pantera, que se unió a él en Qué Onda, aportando ritmo y energía. La conexión fue total con el malageño Delaossa, con quien cantó Still Luvin’, y con Lola Índigo, que interpretó junto a él El Tonto, mostrando una química artística y personal que traspasó las pantallas. La artista granadina lo dijo claro: “Me alegra que estés donde quieres estar, Pedro”. También subió el creador de contenido canario Pablo Vera, que tras un reto viral en redes (alcanzar un millón de likes) cumplió su sueño de cantar Wanda junto a Quevedo.

El momento más emocionante de la noche fue la aparición del grupo folclórico canario Los Gofiones, quienes interpretaron junto a Quevedo las canciones Ay, Mi Gran Canaria y Somos Costeros. La combinación de lo urbano y lo tradicional, que traspasa el marco generacional, fue el momento más histórico y emocionante de la velada. La nostalgia de ver al folclore isleño compartiendo escenario con uno de los artistas más internacionales del momento dejó sin palabras a todos los presentes.

La última canción fue Quédate, el tema que lo catapultó al éxito mundial. Estuvo acompañada de un espectáculo de fuegos artificiales y de una palabras sinceras del músico: «Gracias por seguir acompañándome».

El concierto marcó un antes y un después. No sólo por la magnitud técnica o el récord de asistencia. Lo fue por la emoción cruda, por las lágrimas discretas, por la promesa cumplida de volver donde todo empezó. Por demostrar que, a pesar del éxito, del ruido y de la fama, Pedro Quevedo sigue sabiendo de dónde viene.

Lo último sobre Música

Ir a Top