Las III Jornadas de Comunicación Igualitaria continuaron ayer viernes, 25 de octubre, con una mesa redonda con el motivo de hacer frente a la desinformación, los bulos y los discursos de odio desde la comunicación. La ponencia se celebró en el Aula Magna del Campus de Guajara de la ULL y estuvo organizadas por la Dirección General de Juventud del Gobierno de Canarias junto con el Instituto de Estudios de las Mujeres de la Universidad de La Laguna.
Nayra Bajo, periodista y escritora, dio inicio a la mesa redonda a las 10.30 horas. Presentó al resto de ponentes que la acompañó y, sin preámbulos, les preguntó que tipos de bulos se encontraban en sus ámbitos y que consecuencias tienen en el discurso público. «Los bulos no siempre es aquello falso en sí mismo, sino también el hecho de manipular algo antiguo y hacerlo pasar por actual», definió Carmen Mesa, periodista especializada en desinformación en el feminismo.
«Desinformación es relacionar la inmigración y el aumento de la criminalidad»
Asimismo, considera a los bulos como una práctica «especialmente dañina» para colectivos vulnerables, ya que estos son más susceptibles a los efectos de la desinformación. Por su parte, para Natalia G. Vargas, periodista experta en migración, «un ejemplo claro de desinformación es relacionar la inmigración y el aumento de la criminalidad». Añadió que debemos «trabajar cada día para combatir la falsa información y así no dejar que nos roben el tiempo para contar historias que de verdad valgan la pena»
De igual forma, Yago álvarez, especialista en economía, no dudó en recalcar la facilidad de ser engañado en su sector. «En economía no hace falta mentir para manipular o generar opinión. Los medios económicos cuando quieren engañar a la gente lo tiene bastante fácil. La causa principal de los bulos en la economía son los motivos económicos, políticos y empresariales.», expuso el periodista.
Seguidamente, Nayra Bajo abordó el tema de la migración con la ruta atlántica como protagonista. En la respuesta, Natalia Vargas quizo recalcar que «no todos los migrantes vienen por dicha ruta, aunque sea la que más se muestra en los medios». «La política que hace que las personas busquen migrar hacia las Islas es racismo democrático, pero esas administraciones que después deshumanizan a aquellos que llegan desde alguna ruta también es racismo democrático», define.
«A las mujeres políticas se les persigue más por su vida que por su profesión»
A su vez, Bajo quiso incorporar como tema a la mesa el binomio estructurado entre el machismo y la política. Esta vez, fue Carmen Mesa la encargada en responder. La periodista expone que a «las mujeres que viven de la actividad política se les persigue más por su vida privada que por su profesión en comparación a los hombres». A esto se le suma, según Mesa, que «si encima estas mujeres son de un origen diferente se le añade también el racismo al binomio».
Por último, Nayra Bajo expuso que conforme a un estudio de la Universidad Complutense el 80 % de la población no sabe diferenciar entre lo veraz y la mentira y, con ello, preguntó a los ponentes que alternativas proponen para hacer frente a la desinformación. Mesa, propuso combatir los bulos en todas las redes sociales, no solo en X (antes Twitter) o Instagram. «Existe un gran falta de monitorización de bulos y desinformación en plataformas de mensajería como Whatsapp y debemos abarcar también las nuevas plataformas como Tiktok con contenido veraz», concluye.
Por su parte, Natalia Vargas opinó que «cada persona desde su profesión y ámbito debe dejar su granito de arena para luchar frente a las desigualdades en la comunicación». Del mismo modo, Yago Álvarez aconsejó al público a preguntarse a sí mismo los intereses del medio o canal por el que leemos ciertas informaciones para, combatir así, los mensajes de odio y la desinformación.