Javier Aguilar es el fundador, diseñador y director creativo de la firma canaria Ananas Wear, una marca que nació en el 2018 debido a la necesidad que tenía el público joven de comprar diseños de calidad a precios razonables y de la falta de tallas para personas curvys. Aguilar asegura que también surge porque necesitaba «soltar el mundo creativo que tengo en mi cabeza». Cada colección de la casa de moda contiene veinte piezas de baño, quince de ropa femenina y cinco masculina.
¿Cómo fue crear una marca de moda desde cero? «No fue fácil, al fin y al cabo las ayudas son muy pocas. Hoy en día ya tenemos más proyección, pero los inicios son muy costosos. El tejido que usamos lo traemos de fuera porque aquí no tenemos el tipo de tela sostenible con la calidad que queríamos. Los costes del envío más la aduana se hace caro. Todo va sumando y fue muy difícil. Seguimos ahí al pie del cañón y no nos hemos rendido. Está dando su fruto después de varios años. Aunque sí es verdad que no ha sido todo bonito. Ha habido años de altibajos, de pensar que lo quieres dejar porque hasta aquí puedes llegar».
¿Qué le llevó a ser diseñador? «Mi padre trabajaba en el mundo textil, mi madre tenía una tienda y me empapé de ese mundillo desde la infancia. Desde pequeño descubrí que eso era lo que me gustaba. Más tarde estudié diseño de moda y luego me especialicé en patronaje en lencería, corsetería y baño».
¿En qué se inspiran para crear los diseños? «Todos los estampados son propios y principalmente me baso en temáticas canarias. Los hago yo a mano alzada y mi amigo Iván García me ayuda a digitalizarlos. Aunque el primer año el tema fue distinto, hicimos una colección velvet y la presentamos en la primera edición de la Tenerife Fashion Beach. La siguiente fue con temática cubana-francesa. En la tercera ya decidimos hacer la temática canaria, con pintaderas de Gran Canaria. En la cuarta nos centramos en la flora y fauna autóctona, con el pinzón azul y los helechos. La quinta fue de palmeras locales y plataneras. Este año nos inspiramos en los corales marinos. De hecho, ya estamos preparando la comercialización de esta colección».
¿Qué tienen pensado para la siguiente colección? «La temática va a ser de la isla de Lanzarote. Los colores tierra y algunas tonalidades verdes. Está definida, pero no sabemos si será con estampados abstractos o más visuales y tangibles. Es una Isla que siempre me ha gustado. Me transmite tranquilidad, paz y me recarga las pilas».
¿Cómo mantienen su filosofía de tener precios asequibles y piezas de calidad al mismo tiempo? «La relación calidad-precio nunca va a cambiar. Nuestro público ya está más o menos afianzado. Lo único que puedo ofrecer es un diseño diferente y una calidad suprema, esa es nuestra marca. Esa es la forma en la que competimos con las cadenas que venden productos a precio regalado pero con menor calidad».
«Los tejidos sostenibles duran más y son de mayor calidad»
¿De dónde nace usar materiales sostenibles? «Estamos en un momento en el que o nos ponemos las pilas ya, o la generación que viene detrás nuestra no va a poder disfrutar del Planeta. Llevamos ya tres colecciones con el tejido sostenible y la gente lo acepta bien. Tiene más vida que un tejido de nitra sintético. Lo tocas y ves la calidad, es una suavidad que se nota. Además, usamos tintes naturales y patrones reciclados».
¿Les gustaría colaborar con otras marcas canarias? «Sí, de hecho hemos colaborado con otras firmas, pero desde la sombra, ayudando con los patrones y el tallaje. También con marcas de complementos como Handcrafted. Ha sido un binomio, necesitan bañadores y yo necesito pendientes y collares. Además, cuando presento las colecciones hace piezas inéditas para la pasarela».
¿Qué tiendas tienen en otras partes del Mundo? «Tenemos un punto de venta en Qatar, que mantenemos desde la primera colección. También tenemos dos en la Península, y aquí en Canarias, la mayoría están en hoteles. Este año tenemos un punto nuevo en Mallorca y todavía no sabemos si en Torremolinos, no nos han confirmado».
«A quienes empiecen en la moda les diría que se formen muy bien»
¿Qué le diría a la juventud que está empezando en la moda? » Que no pierdan la ilusión y se formen muy, muy, muy bien porque es un mundo muy competitivo. Nadie te va a dar nada gratis. Los comienzos no son fáciles y menos en una isla porque todo es multiplicado por dos».
¿Con qué complicaciones se han encontrado a lo largo del camino? «Fue muy difícil encontrar un tejido que me gustara, que fuera razonable, sostenible y de calidad. Me ha costado muchísimo. La tela de la primera colección venía de Miami porque no encontramos en ningún otro lado».
¿Qué significa para usted que sus diseños desfilen en la Tenerife Fashion Beach? «Es la pasarela que nos vio nacer. Es donde presentamos las nuevas colecciones. Nos ha dado la oportunidad y ha creído en nuestra marca desde que no éramos nada».
«Mi parte favorita del proceso creativo es estar en el taller»
¿Cuál es su parte favorita del proceso? «Estar en el meollo, en el taller, haciendo los patrones, cortando y viendo el agobio de que tiene que salir ya. No son las sesiones de fotos ni las pasarelas un desfile. De hecho, lo paso mal en los desfiles. No me gusta salir a saludar, siempre me echan la bronca».
¿Qué destacaría de esta edición? «De las siete que ha habido hasta el momento, ha sido la que más he disfrutado. Cambiaron la organización en el backstage y hubo mucha más coordinación y menos tensión. Además, este año llevamos a Andrea Rodríguez, una cantante que interpretó Aguasal en directo. Fue un flechazo con esa canción. De hecho, cuando la escuché por primera vez me emocioné y lloré. Otra anécdota graciosa es que me olvidé de llevar manguitos, capas, pantalones y otros accesorios para el desfile. En el plan original había más volumen, pero creo que al final quedó bien».