Inés Ruiz, profesora de la Facultad de Economía, estudia las características de la actitud emprendedora en el Grupo de Investigación de Empresa y Sociedad de la ULL. En el año 2005 presentó su tesis Análisis de la gestión del agua desde el punto de vista económico, enriqueciendo con su trabajo al grupo, que ya contaba con una línea de carácter medioambiental. Sin embargo, fue en 2007 cuando comenzó a formar parte de él.
Además, Ruiz se encarga de estudiar el coste de fabricación del agua a través de sistemas no convencionales, como la desalación o la regeneración de aguas residuales, con el propósito de garantizar el desarrollo sostenible de las Islas. Recientemente, Caja Canarias ha aceptado un proyecto de su equipo de investigación en el que trabajan la gestión de este recurso natural enfocado al ámbito del turismo y los hoteles.
«El deber de las universidades es preparar a los estudiantes para que vean los cambios como oportunidades y no como amenazas»
La creación de empresas y la intención de aprender son las líneas de investigación que Ruiz aborda en gran parte de sus trabajos, en los que implica a empresas y a estudiantes. La profesora asegura que la capacidad para generar empleo es lo que hace que haya desarrollo económico en una región y que «fomentar la cultura emprendedora no es una opción, sino una necesidad». «Venimos de una tradición de confort en la que pensamos que al terminar nuestra carrera vamos a tener un trabajo, pero de repente te das cuenta de que no es así», aseveró.
La investigadora considera que trabajar la competencia emprendedora es una forma de entrenar a los alumnos para ese entorno en el que se van a tener que defender. Además, apunta que «el deber de las universidades es preparar a los estudiantes para que vean los cambios como oportunidades y no como amenazas», dotándolos de las herramientas necesarias.
El Grupo de Investigación Empresa y Sociedad se encarga de analizar la fase previa al emprendimiento, «cambiar el chip cultural para empezar a pensar de forma diferente, trabajando la innovación y la capacidad de aportar cosas diferentes a la empresa», tal y como señaló Ruiz. La docente confía en que hay muchos estudiantes en la ULL con capacidad de aportar talento. Además, opina que la labor del profesorado es hacer que ese talento salga a la superficie y genere actividad económica, convirtiendo a las Islas en referentes de proyectos innovadores.