«Yo tenía un entrenador que dedicaba diez horas diarias al ajedrez»
Álvaro Guillermo (San Cristóbal de La Laguna, 2004) saluda a todo el mundo a su llegada al Pabellón Central del Servicio de Deportes, lugar en el que hemos acordado encontrarnos. Se define como un chico “muy tímido, muy normalito”, pero lo cierto es que demuestra todo lo contrario de cara a la galería: no tiene problemas en pararse a hablar con sus amigos en la cancha, ni a la hora de abrirse en la entrevista.
Estudia Farmacia en la Universidad de La Laguna, y admite que «el tercer curso se está complicando un poco». De hecho, viene de la biblioteca y volverá a la biblioteca cuando terminenmos. Todavía no tiene muy claro en qué área concreta se imagina como futuro profesional. «Antes estaba seguro de que me iba a dedicar a la investigación, pero me he dado cuenta de que no sirvo para el laboratorio: soy un poco torpe», dice, entre risas.
Es el capitán del equipo universitario de baloncesto Harry Popper, conformado por sus compañeros del Grado. El grupo nació en 2024 en el Torneo Interfarmacia, que enfrenta a fcultades de Farmacia de toda España. Después de terminar la competición con buenos resultados (solo por detrás de la Universidad Complutense y la Universidad de Barcelona en la sección de Baloncesto), se plantearon salir a jugar también en el Trofeo Rector, cuajando un subcampeonato en su primera participación.
Sobre la final del pasado diciembre contra el CD Barraquitos, lamenta la falta de ritmo de competición de su equipo. «Nos faltó jugar más tiempo juntos y tener más química entre nosotros. Tampoco teníamos el aguante físico para competir contra ellos, que entrenan mucho más en comparación. Al final, si concedes canastas fáciles en los contraataques por no poder recuperar, es muy difícil», concluye, autocrítico.
Juega como interior (frecuentemente como ala-pívot, aunque también cumple como pívot circunstancial), así que sorprende un poco que su referente sea Stephen Curry: «Un entrenador me lo mencionó sin conocerlo, y viendo vídeos en Youtube me enamoré de él y de los Warriors. Luego ha resultado que su juego no tiene nada que ver con el mío, creo que me parezco más a Draymond Green». Reconoce que, por tamaño, su posición natural sería la de alero. Un rol que no podría cumplir, según él, porque sus capacidades en el tiro y en el bote están más limitadas. «Tampoco soy un tío especialmente rápido, creo que en la pintura es donde me siento más cómodo y donde mejor aprovecho mi superioridad física», señala.

Lo de la superioridad física no va a la ligera: con su metro noventa y 104 kilos, domina la zona y se impone a sus rivales en el choque. Un cuerpo creado desde un lienzo en blanco: hace cinco años, pesaba solo 70 kilos. «Justo cuando salimos de la pandemia, lo primero que hice fue apuntarme al gimnasio. El primer año fue el del cambio: entre 2020 y 2021 gané veinte kilos. Ahora estoy yendo cinco días a la semana», apunta. Su cambio físico ha transformado para bien su forma de jugar, y de momento no acusa los típicos problemas que se achacan a estas metamorfosis. Asím dice que «lo normal sería que con setenta kilos vueles, y que con cien te cueste algo más correr y saltar, pero siento que tengo la misma capacidad o incluso más».
Después de confirmarse la no participación del CD Barraquitos en el Trofeo Rector Intercentros, Harry Popper se convertió inmediatamente en el favorito de esta edición. Pero a los subcampeones del Libre Asociación se les atragantó la fase de grupos: tras una victoria tranquila contra ACCEM (46-22), cayeron derrotados ante KineX Fisioterapia (54-55): «Considero que fueron superiores, al descanso íbamos doce puntos abajo. Subimos la intensidad en la segunda parte para remontar e intentar rascar una victoria, pero no hubo suerte. Se han reforzado muy bien, con jugadores de mucho nivel. A pesar de la derrota, confiamos en poder imponernos en un posible cruce en la final».
Celebra el buen momento de La Laguna Tenerife en la Liga ACB, y expresa su desconcierto por el traspaso de Luka Doncic a los Lakers el mes pasado. «No me esperaba para nada el traspaso, me quedé impactado. Con el historial de lesiones de Anthony Davis, y lo que hemos visto hasta ahora, lo que concluyo es que Dallas se ha desprendido de su jugador estrella sin nada a cambio. El tiempo dirá, pero no tiene buena pinta para los Mavericks», analiza.
El ajedrez, su otro deporte
La entrevista iba a centrarse originalmente en el Trofeo Rector de Baloncesto, pero Álvaro Guillermo tiene otra faceta muy interesante en la que no podía perder la posibilidad de ahondar. Y es que se podría decir que su deporte principal es el ajedrez: con un Elo FIDE de 2267, está en el puesto número 11 en la clasificación general de Tenerife.
Se le ilumina el rostro cuando le planteo la posibilidad de convertirse en maestro FIDE, título que se alcanza con 2300 puntos. Pero no tarda en serenarse y bajar los pies a la tierra: «Es una motivación que siempre está ahí, pero a corto plazo no lo veo posible, porque no estoy compitiendo ahora mismo y no puedo dedicarle tantas horas. Cuando termine la carrera y tenga más tiempo, me centraré más en conseguir ese objetivo».
Se define como un jugador agresivo que busca llevar la iniciativa. Al respecto, apunta que «el ajedrez, de por sí, no es el deporte más divertido: vas a pasarte cuatro o cinco horas sentado delante de un tablero. Por eso intento dinamizarlo un poco y buscar aperturas y posiciones más dinámicas y entretenidas».
En cuanto a las polémicas que han rodeado estos últimos meses a Magnus Carlsen, número uno mundial y que está «un nivel o dos por encima del resto», se muestra comprensivo con la descalificación (revocada) que sufrió el noruego por llevar vaqueros.
En cuanto a la partición del título de Campeón del Mundial de Ajedrez Relámpago con el ruso Ian Niepómniashi, se pone en el lado de los dos campeones. Subraya que «después de tantas horas y tantas partidas de desempate, ya no se trata de quién es el mejor jugador, sino de quién está menos cansado ese día. Entiendo que la Federación haya aceptado que compartan el premio, pero yo habría visto más razonable que hubieran seguido jugando».
«Cuando termine la carrera, retomaré el objetivo de convertirme en maestro FIDE, pero ahora mismo no es una prioridad»
Hablando sobre la irrupción del ajedrez Freestyle (modalidad en la que se sortea la posición de las piezas antes de cada partida), el universitario pone de manifiesto lo sacrificada que es la élite del ajedrez: «Lo compararía con una carrera universitaria. Todo ese estudio, de todas las aperturas que existen… Los mejores del Mundo pueden memorizar veinte jugadas dentro de una línea, y si cambias de línea, otras veinte jugadas… Tienen muchas horas de análisis dentro de sus cabezas».
En relación al bajo número de mujeres federadas en comparación con los hombres, cree que el problema está en la adolescencia, porque «en los primeros años, el porcentaje está bastante parejo».